Los autónomos pueden aplicar los incentivos fiscales de las “empresas de reducida dimensión”

Los empresarios individuales que calculan sus rendimientos mediante la denominada “estimación directa” (ingresos menos gastos) y facturan menos de 10 millones de euros pueden aplicar los incentivos fiscales de las “empresas de reducida dimensión”. Recuerde alguno de estos incentivos:

• Pueden aplicar la “libertad de amortización con creación de empleo”, siempre que realicen inversiones en activos materiales nuevos y, a la vez, incrementen su plantilla.
• Pueden aplicar una amortización acelerada sobre los activos nuevos. En concreto, pueden amortizar dichos activos por el doble de lo que lo hacen habitualmente las grandes empresas, o incluso por el triple si dichos activos han sido adquiridos mediante leasing.
• También pueden computar un gasto global por deterioro del saldo de clientes a 31 de diciembre, hasta que dicho deterioro alcance el 1% de dicho saldo.
• Por último, también pueden aplicar una deducción en la cuota del IRPF de hasta el 5% de la inversión realizada en activos nuevos. Dicha deducción es específica para los empresarios individuales, y no es aplicable a las sociedades.

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